El rubio ceniza es uno de los colores de moda este otoño para el cabello. Se lo hemos visto a famosas e influencer y hemos deseado con todas nuestras fuerzas dar el paso y cambiar de look con este tono tan elegante y favorecedor. Pero, ¿cómo saber si realmente nos favorece este tinte?
Hemos elaborado esta guía para saber qué tono de rubio elegir en función de nuestro color de piel u ojos.
¿A quién le favorece el rubio ceniza?
Atenta, toma nota y comprueba si cumples las siguientes características:
- Rostros pálidos y pieles claras. Sus pigmentos fríos resaltarán tus facciones
- Ojos claros
- Cabello natural rubio oscuro o rubio claro
- Piel tersa y suave, ya que al ser un color apagado, intensifica las facciones
Si no te quieres arriesgar, una forma de saber si te quedará bien el rubio ceniza es empezar por unas mechas suaves. Así podrás cambiar de look de forma progresiva y poco a poco ir acostumbrándote. Especialmente si siempre has llevado el pelo de tu tono natural. Si tu pelo es rubio, también puedes echarte un baño de color, que se irá quitando poco a poco.
Así podrás decidir si te gusta o no.
¿Y qué pasa con las cejas? Si quieres puedes
¿Cuándo evitar este tono de tinte?
Teniendo en cuenta los tips anteriores, el color rubio ceniza podría favorecerte menos si:
- Tu pelo natural es negro o muy oscuro
- Tienes piel muy morena
- Si tu tono de piel es cálido, te quedarán mejor rubios dorados y caramelos
Claves para elegir el rubio ideal
Existen diversos aspectos para determinar cuál es el tono de tinte que más te favorece:
- Pieles oscuras. Este tipo de piel combina muy bien con tintes castaños claros, tonos avellana y miel. Si además tienes los ojos claros, te favorecerán las mechas rubias claras o doradas. Y si son marrones, te quedarán bien las mechas rubias oscuras o color miel.
- Pieles intermedias. Si tienes la piel ligeramente tostada, te verás genial con los cobrizos. Y si tira más a rosa, te irán mejor los rubios claros.
- Pieles muy blancas. Las pieles muy pálidas se verán más favorecidas con rubios dorados, que aporten algo de contraste. También te quedarán bien los rubios platinos.
Si sigues con dudas, probablemente te interese probar el tono bronde, una mezcla de rubio y castaño que siempre favorece.
Para conseguir el tono adecuado primero se crea una base más oscura en la zona de la raíz, y luego se incorporan rubios en diferentes tonos, en función de lo que más le favorezca a cada rostro.