La rosa mosqueta (Rosa rubiginosa) es un arbusto silvestre de la familia de las rosáceas originario de Europa. Esta planta es muy conocida por el aceite esencial que se extrae de sus semillas a través del prensado en frío, pues tiene numerosos beneficios para la piel.
El aceite de rosa mosqueta tiene propiedades reafirmantes, reparadoras, hidratantes, antioxidantes y antiinflamatorias, entre otras. Estas propiedades proceden de su composición, pues es rico en ácidos grasos esenciales como el omega 3, el omega 6 y el oleico. Además también contiene vitaminas A, C y E y antioxidantes naturales.
Por todas las propiedades que tiene, este aceite esencial es uno de los más utilizados. Además de aplicarse directamente sobre la piel, también se añade como ingrediente en muchos productos cosméticos (geles, cremas de manos, bálsamos labiales…). Estos son los beneficios para la piel y el cabello de usar el aceite esencial de rosa mosqueta.
Beneficios para la piel del aceite de rosa mosqueta
La aplicación del aceite de rosa mosqueta tiene los siguientes beneficios para la piel:
- Repara la piel dañada e irritada, mejorando el aspecto de heridas, quemaduras, marcas de acné y cicatrices. Es recomendable usarlo en cuanto aparece cualquier daño en la piel, aunque puede regenerar antiguas cicatrices.
- Hidrata en profundidad las pieles más secas: el aceite de rosa mosqueta evita que la piel pierda agua, consiguiendo que esté más tersa y luminosa. Además, gracias a la hidratación, la piel es menos vulnerable a agresiones externas como el frío.
- Retrasa su envejecimiento: las vitaminas A, C y E que contiene previenen la oxidación de las células y la formación de radicales libres que causan el envejecimiento cutáneo, retrasando la aparición de las arrugas. Su vitamina C atenúa las líneas de expresión mientras que la vitamina A se convierte en ácido retinoico, ingrediente que aumenta la producción natural de elastina y colágeno.
- Previene el fotoenvejecimiento, pues funciona como una barrera que protege la piel de la radiación solar y evita que penetre hasta las capas más profundas de la dermis. Esto reduce la aparición de manchas.
- Reduce la hiperpigmentación: es decir, ayuda a eliminar las manchas que aparecen como consecuencia del paso del tiempo. De esta manera, la piel luce un tono más uniforme.
- Reduce las estrías: los ácidos grasos de este aceite aceleran la regeneración de la piel en las zonas donde han aparecido estrías. Por ello es aconsejable usarlo tanto para prevenir la aparición de las estrías durante el embarazo, como después del mismo para reparar la piel. Por la misma razón es recomendable aplicarlo cuando vaya a producirse un cambio brusco de peso.
No hay contraindicaciones que impidan usar este aceite ni durante el embarazo ni durante la lactancia. De hecho, el aceite de rosa mosqueta es un ingrediente muy usado en productos infantiles como cremas, aceites y lociones, ya que hidrata y nutre la piel de los pequeños sin dañarla. Además la protegen de factores externos como el frío o el sol.
Para usar el aceite de rosa mosqueta solo hay que aplicar una pequeña cantidad sobre la piel y masajearlo hasta se absorba. Un uso diario del mismo conseguirá mejores resultados.
Beneficios para el cabello del aceite de rosa mosqueta
Aunque se usa comúnmente para la piel, el aceite de rosa mosqueta también tiene algunos beneficios para el cabello gracias a sus propiedades regenerativas e hidratantes. Su aplicación:
- Repara el cabello dañado por el calor del secador, el cloro o los tintes.
- Consigue que el pelo luzca sedoso y brillante en lugar de apagado.
- Evita la descamación y restaura la hidratación natural, por lo que sirve para tratar la caspa.
- Previene las sequedad de las fibras capilares.
- Combate el encrespamiento.
Para aplicarlo sólo hay que echarlo sobre el cuero cabelludo y las puntas, masajeándolo suavemente y dejando que actúe unos minutos antes de enjuagarlo.
Deja una respuesta