La caída del pelo es algo habitual tanto en hombres como en mujeres, ya que está calculado que cada día se caen de la cabeza entre 50 y 100 pelos para que puedan crecer nuevos. No obstante, por diversas causas como la genética, los cambios hormonales o la falta de hierro, el volumen de pelo perdido al día es mayor del habitual en algunas personas.
Muchas personas con gran volumen de caída del cabello recurren a productos como champús anticaída, ampollas, vitaminas… para evitar quedarse calvas, pero la mayoría de estos productos no son muy eficaces ni está demostrado que funcionen. No obstante, existe un compuesto llamado minoxidil del que hay evidencias científicas suficientes para recomendarlo en caso de alopecia androgénica.
Qué es minoxidil
El minoxidil es un medicamento vasodilatador y antihipertensivo, es decir, que reduce la tensión arterial. No obstante, hoy en día apenas se usa con este fin (pues existen otros medicamentos más modernos), sino que se ha aplicado al tratamiento de la calvicie.
Sus efectos sobre el pelo se descubrieron al observar que a las personas que tomaban minoxidil para la hipertensión les salía más vello y se les fortalecía el cabello. En un principio se creía que el minoxidil, al potenciar la circulación y llegada de la sangre a los folículos pilosos del cuero cabelludo, los estimulaba y evitaba la miniaturización de los mismos. Sin embargo, recientes estudios han demostrado que la irrigación sanguínea no tiene una intervención decisiva en la pérdida del pelo. El minoxidil lo que hace es prolongar la supervivencia de los queratinocitos (las células del folículo piloso que producen la queratina) y estimular la reproducción de los bulbos pilosos y el potasio presente en las células.
No obstante, hay que precisar que el minoxidil no es eficaz en cualquier tipo de alopecia, sino que está indicado para tratar la alopecia androgénica. Se puede usar en personas de ambos sexos, aunque las concentraciones variarán para cada uno.
Efectos del minoxidil
Los efectos del minoxidil son varios, aunque esencialmente sirve para conseguir estas tres cosas:
- Detener la caída del pelo.
- Estimular el crecimiento del cabello.
- Revitalizar el pelo y alargar el tiempo de fase de crecimiento del mismo, acortando por tanto la fase de reposo.
Durante el tratamiento con minoxidil hay que tener en cuenta lo siguiente:
- El fármaco es especialmente eficaz en personas de menos de 40 años o que tengan los primeros efectos de la alopecia recientes. Cuanto más extensa sea la calvicie en entradas o coronilla, más difícil será recuperar su aspecto habitual.
- Su efecto no es inmediato. Se tardan unos cuatro meses en observar los resultados y en los dos primeros es posible observar que el pelo se cae más, lo que es normal. El pelo cae para dar paso al crecimiento de cabello más robusto.
- El minoxidil no es un “crecepelo”. Su objetivo principal es que la alopecia no avance.
- Es un tratamiento de por vida: en el momento en el que se suspenda su uso volverá la caída.
- No deben usarlo mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
Cómo aplicar minoxidil
El minoxidil se puede adquirir en diferentes presentaciones, todas ellas tópicas. Lo más habitual es comprarlo en formato loción o espray, aunque también existe en forma de champú e incluso gel y crema.
En cuanto a las concentraciones, existen dos principalmente. Para los hombres se recomienda usar minoxidil al 5%, mientras que para las mujeres no se aconseja aplicarlo a más del 2% de concentración para evitar el efecto indeseado de aparición de vello facial. A la hora de usar el minoxidil se deben seguir las indicaciones del dermatólogo, aunque lo más habitual es aplicar 1 ml sobre el cuero cabelludo dos veces al día. Después es recomendable dar un pequeño masaje con los dedos para extenderlo.
Efectos adversos del minoxidil
Habitualmente el tratamiento con minoxidil es muy seguro y no suele dar problemas. Algunos efectos secundarios (que desaparecen al suspender el tratamiento) son:
- Picor o irritación del cuero cabelludo, ya que se suele formular disuelto en propilengicol, un compuesto que puede irritar la piel. En caso de sufrir este problema se puede usar el formato espuma, que carece de este compuesto.
- Hipertricosis facial (crecimiento del vello en la cara): no es muy frecuente pero puede aparecer si se utilizan concentraciones de minoxidil al 5% en solución.
- Dolor de cabeza, mareos o debilidad en los primeros días de tratamiento.
- En caso de sobredosis pueden aparecer zumbidos en los oídos, aumento de peso e hinchazón de extremidades. También puede provocar inflamación generalizada si se tiene alergia a sus principios activos.
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