Un peeling facial es un procedimiento estético no invasivo que tiene el fin de mejorar la piel del rostro. El peeling consiste en la aplicación de una solución química sobre la piel, que ayuda a exfoliar y eliminar las capas externas dañadas y envejecidas de la piel. Esto estimula la regeneración celular y promueve la aparición de una piel más suave, radiante y rejuvenecida. Y aunque se trata de un tratamiento que suele realizarse en centros de estética, también puedes hacerte tú misma un peeling facial en casa. ¡Te contamos cómo!
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Cómo hacerse un peeling facial en casa
Existen peelings que están específicamente pensados para aplicarlos en casa. Estos peelings de uso domiciliario tienen una concentración más baja que los tratamientos en clínicas. Son productos que contienen ácido salicílico y/o glicólico”. También los productos con retinol tienen un efecto de exfoliación continua, pero de forma menos marcada.
Puedes hacerte el peeling facial en casa una vez al mes, mientras que los peelings faciales químicos se recomiendan más o menos una vez cada dos o tres meses.
Los productos exfoliantes para aplicar en casa te ayudarán a tener una piel más bonita, más luminosa y suave, con menos arrugas y problemas como el acné. Además, ahora en verano, exfoliar el rostro es la mejor manera de conseguir un bronceado uniforme y sin manchas.
Evalúa tu tipo de piel
Antes de comenzar, identifica tu tipo de piel. Si tienes piel sensible, seca o con alguna condición cutánea, es recomendable que consultes a un dermatólogo antes de realizar un peeling casero. Las pieles grasas o mixtas pueden tolerar mejor el peeling facial en casa, pero siempre es esencial realizar una prueba en una pequeña área de la piel para asegurarte de que no haya reacciones adversas.
Prepara tu piel
Limpia tu rostro con un limpiador suave y asegúrate de que esté libre de maquillaje y suciedad. Evita utilizar productos con ingredientes irritantes, como ácidos o exfoliantes, antes del peeling.
Elige el tipo de peeling
Opta por un peeling facial adecuado para hacerlo en casa, como un peeling enzimático o un peeling suave a base de ácido glicólico o ácido láctico. Los peelings con partículas abrasivas o químicos más fuertes, como el ácido salicílico o el ácido tricloroacético (TCA), deben ser realizados por profesionales.
Aplica el peeling
Aplica el producto en el rostro, evitando el área de los ojos y los labios. Si es un peeling enzimático, déjalo actuar durante el tiempo recomendado y luego enjuaga con agua tibia. Si es un peeling químico, puede haber un ligero hormigueo o sensación de calor, pero si experimentas un dolor intenso o ardor insoportable, retira inmediatamente el producto con agua.
Hidratación post-peeling
Después de completar el peeling, hidrata tu piel con una crema hidratante suave y sin ingredientes irritantes. Evita el sol y utiliza protector solar durante los días posteriores al peeling.
Si tienes alguna duda o te gustaría hacerte un peeling facial con resultados más inmediatos, consulta con un profesional de la estética o dermatología.
