¿Por qué es tan importante hacer una buena limpieza facial todos los días?
La limpieza facial diaria, con los productos adecuados, resulta imprescindible para conseguir que la piel del rostro luzca siempre bien hidratada y luminosa.
Lavarse la cara a diario
La piel del rostro va perdiendo luminosidad y uniformidad. Además, la contaminación del aire, la propia grasa que genera la piel, el maquillaje y las impurezas, acaban obstruyendo los poros e impidiendo que la piel respire correctamente. Para evitar estos problemas, hay que conocer la importancia de una correcta limpieza facial e incluirla como un hábito más en el día a día.
Beneficios de la limpieza facial
La piel del rostro es la que más se expone a la suciedad y la contaminación. Por eso, entre los beneficios de una limpieza facial adecuada encontramos los siguientes:
- Oxigenar la piel
- Retrasar el envejecimiento
- Devolver la luminosidad
- Combatir el acné y puntos negros
- Una piel más suave y tersa
- Darle frescura y vitalidad a laie hacer que la piel se vuelva más luminosa, ayudar a eliminar el acné y los puntos negros, hacer que la piel luzca más suave y tersa, y disminuir la apariencia de cansancio
- Preparar la piel para otros cosméticos y tratamientos, como el sérum facial
- Ayuda a conseguir un maquillaje más profesional
Así es una buena limpieza facial efectiva
Aunque muchos días no nos apetezca hacer una limpieza facial en profundidad, hay que tener en cuenta que no hacerlo hace que la piel vaya perdiendo luz y aparezcan imperfecciones. Así que no olvides hacer una limpieza facial completa, cada noche y también cada mañana. ¡Sin excepción!
- Desmaquillante: Empieza la limpieza facial con un buen desmaquillante, adecuado al tipo de piel y también a los productos de maquillaje que solemos utilizar. También existen desmaquillantes para zonas específicas del rostro, como son los labios o los ojos. Para desmaquillar la piel puedes usar toallitas, leche desmaquillante, bálsamo o agua micelar.
- Completar la limpieza con gel: Tras aplicar el desmaquillante y retirarlo, en caso de ser necesario, puede aplicarse un gel o aceite limpiador para conseguir una limpieza en profundidad.
- Exfoliación: La exfoliación no se hará a diario, sino una o dos veces a la semana, después de la limpieza facial.
- Tónico: El tónico es otro producto que debe utilizarse en la limpieza facial. Este cosmético líquido, ayuda a cerrar los poros y a equilibrar el pH de la piel.