Con los años es corriente que la magia o la pasión inicial de las parejas disminuya. En contra de lo que muchas personas creen, no se trata del fin de una etapa, sino del comienzo de otra. Así, si durante los primeros años es usual sentir una pasión desbordada ante la pareja, con el tiempo esa efusividad da paso a una alegría más sosegada y, por ende, tranquila.
Pese a ello, es importante que las parejas hagan un esfuerzo por mantener la atracción y complicidad inicial. El mantenimiento del vínculo no solo es emocional, sino que también incluye la atracción sexual, el uso de prácticas nuevas y divertidas (como juguetes sexuales u otras experiencias) y el invertir tiempo de calidad en pareja. Todo ello permite disfrutar de una relación sana, próspera y sólida.
Buscar hobbies en común o tiempo de calidad
Aunque con el tiempo las parejas tienden a abandonar algunos planes y buscar el ahorro económico (una situación que se justifica por la compra de una vivienda en común, el mantenimiento de hijos u otras metas), los psicólogos de pareja recomiendan seguir realizando ciertas actividades juntos, más allá del entorno familiar.
En este sentido, pequeños actos como acudir al cine, cenar fuera de casa de vez en cuando o realizar otras actividades, como senderismo o viajar, ayudan a mantener y consolidar el vínculo afectivo entre los miembros de la pareja. Así, es importante que veamos a nuestra pareja como un amigo o una amiga, una persona con la que podemos divertirnos y pasarlo bien en nuestro tiempo de ocio.
Tiempo libre e independencia
Pese a lo que acabamos de comentar, una relación sana es un vínculo en el que dos personas, pese a quererse y apostar por estar juntos, pueden realizar actividades sin el otro. En este sentido, en una relación sana cada uno de los implicados cuenta con amigos de confianza con los que puede salir de vez en cuando y desahogarse. Aunque el amor romántico tradicional no defendía esta idea, en la actualidad la sociedad es más consciente de la necesidad de separar amor y dependencia emocional.
Relaciones íntimas y pasión
Como hemos comentado, es usual que las parejas con el tiempo pierdan algo de esa «magia» inicial. No debemos preocuparnos si, llegado un momento, no sentimos ante nuestra pareja la misma efusividad que en un comienzo. Este proceso es normal y se da en prácticamente el 100% de las relaciones.
No obstante, la atracción por la otra persona es uno de los principales puntos que separa la amistad del amor. Así, es importante intentar mantener el erotismo y la llama encendida, y realizar un esfuerzo comunicativo cuando algo no vaya bien. En este sentido, la recuperación de la pasión inicial depende de cada pareja. En algunos casos esta se da cuando los vínculos emocionales y afectivos se ven reforzados; en otros casos, los protagonistas acuden a nuevas prácticas, como la introducción de juguetes eróticos, lencería u otros artículos disponibles en tiendas como Zensual.
Independientemente de cuál sea la solución, lo más importante es que la comunicación entre los miembros sea fluida y que cada uno ponga sobre la mesa sus necesidades y miedos. De este modo, la pareja saldrá reforzada y mejorará su atracción sexual hacia el otro.
