El yoga es mucho más que una práctica para liberar el estrés; es una herramienta integral para mejorar la salud física y mental. En esta ocasión destacamos la capacidad para activar el flujo sanguíneo, favorecer el drenaje linfático y potenciar la eliminación de toxinas, lo que resulta de gran ayuda para reducir la inflamación y mejorar la digestión. Así que si sufres de inflamación en el vientre, te animamos a incorporar estas posturas de yoga para combatir el vientre inflamado, ya que pueden ayudarte a sentirte más ligera y sin los incómodos síntomas de la hinchazón.
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Prasarita Padottanasana
La Prasarita Padottanasana es una postura de yoga ideal para estirar la columna, mejorar la circulación y estimular el drenaje de líquidos. Para realizarla, colócate de pie con las piernas bien abiertas, superando el ancho de las caderas. Luego, inclina el torso hacia adelante y flexiona el cuerpo hasta tocar el suelo, asegurándote de mantener la espalda lo más recta posible.
Puedes intentar alcanzar tus tobillos o, si es necesario, dejar que las manos caigan hacia el suelo de forma natural. Mantén esta postura entre 30 segundos y 1 minuto, respirando profundamente. Este estiramiento no solo alivia la tensión en la zona abdominal, sino que también ayuda a liberar toxinas y mejora la digestión.
Malasana
La Malasana, o sentadilla india, es otra asana muy beneficiosa para reducir la inflamación. Esta postura consiste en ponerse de pie con las piernas separadas al ancho de las caderas y las puntas de los pies orientadas hacia afuera. Luego, baja lentamente en una sentadilla profunda, juntando las manos frente al pecho y alargando la columna vertebral mientras mantienes el equilibrio con la mirada fija al frente. Mantén la posición entre 30 segundos y 1 minuto. La Malasana favorece el flujo sanguíneo en la zona inferior del cuerpo y estimula el drenaje linfático, ayudando a disminuir la retención de líquidos. Además, al trabajar los músculos de las piernas y los glúteos, fortalece la zona, lo que es crucial para combatir la inflamación y mejorar la digestión.
Ardha Matsyendrasana, otra de las mejores posturas de yoga para combatir el vientre inflamado
La Ardha Matsyendrasana, o media torsión espinal, es perfecta para estimular el sistema digestivo y promover la eliminación de toxinas. Para realizar esta postura, siéntate con la espalda recta y las piernas extendidas. Dobla una pierna y crúzala por encima de la otra, apoyando la planta del pie en el suelo, a la altura de la rodilla opuesta. Gira suavemente el torso hacia el lado contrario, alargando la columna vertebral y manteniendo una base firme. Mantén la posición durante 30 segundos a 1 minuto en cada lado. Este giro ayuda a masajear los órganos internos, mejorando la digestión y regulando el sistema hormonal, lo que es fundamental para combatir la inflamación crónica y la hinchazón.
Conclusión
Incorporar estas tres posturas de yoga para combatir el vientre inflamado en tu rutina semanal, practicándolas de tres a cuatro veces por semana, puede ayudarte a aliviar la inflamación y mejorar la digestión, promoviendo un vientre más plano y una sensación de bienestar general.
Por otro lado, el yoga no solo actúa a nivel físico, sino que también reduce el estrés, uno de los principales desencadenantes de la inflamación.
¡Anímate a probar estas posturas y descubre cómo el yoga puede transformar tu bienestar!
