El delineador de ojos tiene el poder de transformar por completa la apariencia de la mirada, y aplicándolo bien, también tiene el super poder de aportar un aspecto más juvenil.
Aquí te presentamos tres técnicas de delineador de ojos que te ayudarán a conseguir ese efecto rejuvenecedor que buscas.
Delineador de ojos con dos tonos
La técnica del eyeliner bicolor, o «dos tonos», es ideal para lograr una mirada que rejuvenece al instante. El truco es combinar un tono principal para la línea superior con otro contraste en la línea de agua inferior.
Para empezar, aplica un delineador de ojos en la parte superior del ojo siguiendo las pautas que recomiendan los expertos: una línea ascendente, pegada a las pestañas y de grosor moderado. Esta forma de trazar el rabillo le da un efecto levantando al ojo, abriendo la mirada y aportando luminosidad. Para el toque final, utilice un lápiz de un tono distinto –preferiblemente más claro o incluso con un matiz diferente– para perfilar suavemente la línea de agua inferior. Este contraste no solo añade un toque divertido y creativo, sino que también equilibra el maquillaje y da la impresión de una mirada más descansada y juvenil.
La clave de esta técnica es la sutileza: asegúrate de que ambos tonos se complementen y se difuminen ligeramente, evitando que el delineado se vea demasiado marcado o rígido. El resultado es un efecto natural que resalta la belleza de tus ojos y te hace lucir más joven.
Delineador de ojos en marrón
El delineador de ojos en tono marrón es un aliado clásico y elegante para quienes desean realzar la mirada sin recurrir a un contraste excesivamente dramático. Este tono, especialmente en pieles claras, aporta calidez y suavidad al aspecto.
Para hacerse este delineador de ojos, utilice un lápiz o una sombra en crema de un marrón suave. Dibuja una línea delicada y ligeramente difuminada a lo largo del borde superior del ojo, siguiendo su forma natural. La idea es que el delineado se vea sutil y no demasiado oscuro, permitiendo que la luz se refleje de manera natural en el contorno de tus ojos.
Además, puedes difuminar el producto con una brocha fina para lograr un acabado más suave y menos definido, lo que crea un efecto “halo” alrededor de tus ojos. Este método no solo enfatiza la belleza natural de tu mirada, sino que también disimula pequeñas imperfecciones, aportando un aspecto juvenil y fresco sin el peso de un delineado negro o demasiado intenso.
Delineador de ojos sutil y difuminado
La tercera técnica se basa en un delineado casi imperceptible que realza la forma de tus ojos de manera muy natural. Se trata de un delineador de ojos sutil y difuminado, ideal para quienes prefieren un look natural y cómodo.
Para lograr este efecto, utiliza un producto de alta calidad en formato líquido o en gel y aplica una línea muy fina a lo largo del párpado superior. La intención es marcar una sutil franja que se desvanezca en un delicado rabillo ascendente, sin exagerar la línea. La parte clave de esta mirada es difuminar el delineado en la zona exterior del ojo, manteniéndolo a ras de las pestañas para que se funda con el resto del maquillaje.
Este estilo, aunque discreto, tiene un gran impacto: da la sensación de que el maquillaje ha sido aplicado con precisión y cuidado, resaltando la forma natural de tus ojos y aportando un efecto lifting sin parecer exagerado. Es perfecto para el día a día, permitiéndote lucir un look refinado y natural sin esfuerzo.
