Las canas son un tema que genera muchas dudas y creencias, pero hay una que ha pasado de generación en generación: “Si te arrancas una cana, te saldrán más”. Seguramente alguna vez lo has escuchado (o incluso lo has repetido con temor), pero ¿qué hay de cierto en esto? ¿Qué pasa si me arranco una cana?
Si estás en plena lucha contra esos primeros cabellos blancos que empiezan a asomarse, quédate, porque aquí te contamos qué pasa realmente cuando decides arrancar una cana.
La verdad sobre el mito: ¿Si me arranco una cana me salen más?
Para tranquilidad de muchos, este mito es falso. La ciencia nos dice que cada cabello crece de un folículo piloso individual, lo que significa que arrancar una cana no afectará a los folículos vecinos ni hará que crezcan más cabellos blancos en su lugar.
Entonces, ¿por qué parece que cuando arrancamos una, con el tiempo aparecen más? La respuesta es simple: el envejecimiento y la genética. La canicie (aparición de canas) es un proceso natural que ocurre cuando los melanocitos, las células encargadas de producir melanina (el pigmento que da color al cabello), dejan de funcionar. Esto puede suceder por factores genéticos, estrés, alimentación o incluso cambios hormonales. Por lo tanto, si notas que con el tiempo aparecen más canas, no es porque te hayas arrancado una, sino porque tu cabello está en proceso de perder pigmentación de manera progresiva.
¿Es malo arrancarse las canas?
Aunque el mito es falso, esto no significa que arrancarse las canas sea una buena idea. De hecho, hacerlo puede ser perjudicial para la salud del cuero cabelludo. Estas son algunas razones:
🔹 Daño en el folículo piloso. Si te arrancas un cabello blanco repetidamente, puedes debilitar el folículo hasta el punto de que deje de producir pelo, lo que puede provocar zonas con menos densidad capilar o incluso pequeñas calvas.
🔹 Cabello más rebelde. Cuando la cana vuelva a crecer, lo hará con la misma textura, pero al perder su estructura inicial, puede salir más gruesa y con una apariencia más encrespada.
🔹 Posibles infecciones. Tirar del cabello con demasiada fuerza puede causar irritación o pequeñas heridas en el cuero cabelludo, aumentando el riesgo de infecciones.
¿Qué hacer en lugar de arrancar las canas?
Si no te gusta cómo se ven las canas pero tampoco quieres dañarte el cabello, aquí tienes algunas alternativas:
- Tinte. La opción más común para cubrir las canas. Puedes optar por tintes permanentes, semipermanentes o baños de color según la intensidad que prefieras.
- Retoca raíces y cubre canas. Estos productos aunque no son permanentes como los tintes, pueden sacarte de un apuro al cubrir las canas o raíces que han crecido y están sin teñir.
- Reflejos o balayage. Si no quieres teñir todo tu cabello, estas técnicas pueden ayudar a disimular las canas de forma más natural.
- Productos matizadores. Algunos champús o acondicionadores con pigmentos pueden ayudar a mejorar el tono de las canas, evitando que se vean amarillentas.
- Lúcelas con estilo. Cada vez son más las personas que eligen llevar sus canas con orgullo, y con el cuidado adecuado, el cabello blanco puede lucir espectacular.
Conclusión
Arrancarte una cana no hará que crezcan más, pero sí puede dañar tu cuero cabelludo. Así que si aún tienes pocos pelos blancos y te preocupa su aparición, lo mejor es optar por soluciones que no afecten la salud de tu cabello. Y si decides lucirlas con naturalidad, ¡recuerda que unas canas bien cuidadas pueden ser sinónimo de estilo y elegancia!