Para los amantes de la cocina, elaborar sus platos favoritos es un placer. Sin embargo, muchas veces el diseño de la cocina y el tipo de materiales empleados en revestimientos como el credencias o salpicadero de cocina, no ayudan a disfrutar de estas tareas. Ya que hacer una buena elección de estos materiales no solo aportará estilo a tu cocina, sino que también te ayudará a cocinar más cómodamente y seguir planes de trabajo más eficientes. De ahí que sea tan importante conocer los distintos tipos de salpicaderos antes de comprar o reformar tu cocina.
La importancia de elegir el salpicadero de cocina adecuado
Hoy en día, los revestimientos de cocina están pensados para facilitarnos la vida (y la limpieza). En el caso de las paredes que se encuentran sobre la encimera y los muebles superiores, elegir el material adecuado es especialmente importante si tenemos en cuenta la cantidad de salpicaduras que reciben cada vez que cocinamos. En este sentido, el material que recubre estas zonas debe resistir a todos los agentes externos que pueden erosionar su aspecto: Grasa, humedad, manchas de alimentos, calor…
Lo mejor de todo es que hoy en día no hay que renunciar al diseño para disfrutar de una cocina eficiente, pues existen multitud de modelos de salpicaderos de cocina, con los que es posible crear todo tipo de diseños que son prácticos y atractivos a la vez.
Si eres de esas personas a las que les gusta llevar un plan de trabajo organizado y rendir más en las labores de cocina, un buen salpicadero te permitirá seguir tu plan sin tener que parar más tiempo de la cuenta a limpiar esta zona.
¿Cómo elegir el salpicadero para la cocina adecuado?
A la hora de elegir el salpicadero adecuado deberemos valorar tres factores: Funcionalidad, practicidad y seguridad. Por ejemplo un salpicadero estratificado o de cristal resulta extremadamente fácil de limpiar. Basta con pasar un paño húmedo y quitar las salpicaduras que hayan podido caer en él. Además, el acabado de este material multiplica visualmente el espacio y la luz.
Pero además de su parte funcional, se trata también de un elemento central del diseño de la cocina, que completa su estilo, así que no está de más tomarse un tiempo para escoger el adecuado. Hoy en día los salpicaderos pueden personalizarse por completo. Si la cocina es monocromática, podrás jugar con más opciones de color en esta zona. Cada usuario elegirá si quiere que sea más llamativa, o discreta.
Tipos de credencias
- Credencias de cristal. Los salpicaderos de vidrio son fáciles de limpiar y muy resistentes a las altas temperaturas, por lo que pueden colocarse sobre los fuegos de cocina, para evitar salpicaduras de alimentos en la pared. Además, el acabado de este material multiplica visualmente el espacio y la luz. Pueden encontrarse modelos de cristal lacado, con colores lisos y brillantes, o bien con cristales estampados con motivos geométricos, de baldosas hidráulicas, etc.
- Salpicadura de acero inoxidable. Especialmente fácil de limpiar y muy higiénico, suele utilizarse en las cocinas profesionales. También resiste genial al calor, por lo que suele colocarse detrás de las placas de cocción de gas.
- Credencias de cuarzo. Con un acabado similar a la piedra en apariencia, el cuarzo ofrece un diseño muy atractivo y elegante, además, es fácil de limpiar.
- Salpicadura de cerámica. También ofrece el aspecto de piedra natural, aunque ofrece una resistencia al calor superior que el cuarzo.
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